El ruido, ese fenómeno omnipresente en nuestras vidas urbanas, es más que una simple molestia, es un contaminante invisible que afecta nuestra salud y bienestar. El Día Internacional de Concientización sobre el Ruido, que se celebra el último miércoles de abril, nos recuerda la importancia de reconocer y actuar contra este problema ambiental y social.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha establecido que los niveles de ruido superiores a 70 decibelios (dB) pueden ser perjudiciales para la salud, y recomienda no exceder los 85 dB durante un máximo de 8 horas al día. La exposición prolongada a niveles altos de ruido puede provocar una disminución en la capacidad auditiva, hipertensión arterial, estrés, entre otros trastornos físicos y psicológicos.
En este día, organizaciones y gobiernos alrededor del mundo realizan actividades para educar a la población sobre los efectos del ruido y promover prácticas que contribuyan a reducir la contaminación acústica. Desde medir los decibeles en nuestras actividades diarias hasta adoptar hábitos que disminuyan el ruido, cada acción cuenta.
¡La pérdida auditiva inducida por el ruido es una de las principales causas de discapacidad auditiva!
En México, más de 2.3 millones de personas padecen discapacidad auditiva, con un significativo porcentaje correspondiente a personas mayores de 60 años.
El Día Internacional de Concientización sobre el Ruido es una oportunidad para reflexionar sobre nuestro entorno sonoro y tomar medidas para preservar nuestra salud auditiva y la calidad de vida. Es un llamado a la acción para que individuos, comunidades y gobiernos trabajen juntos en la búsqueda de soluciones sostenibles que nos permitan vivir en un mundo menos ruidoso y más armonioso.
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