El ruido actualmente se le conoce como la contaminación acústica, el cual es un problema de salud pública y ambiental que pocas veces identificamos como el causante de diversos padecimientos de salud, el cual debe ser atendido por la sociedad y dejar de verlo como una simple molestia a la que podemos o debemos acostúmbranos.
La contaminación acústica son sonidos indeseables, inarticulados, sin armonía ni ritmo, desagradables y molestos al oído la mayoría de las veces, afectando a las personas mientras estas duermen o cuando desarrollan cualquier actividad, teniendo diversos orígenes como: motores de autos, aviones y motocicletas; la actividad comercial, los centros de esparcimiento y diversión entre otros.
En 1910, Edward B. Nitchie, sufrió problemas laborales y personales por sordera, lo cual lo llevó a crear en Nueva York la Liga para el Deficiente Auditivo con el fin de mejorar la calidad de vida de las personas con problemas auditivos.
La pérdida del oído se ha convirtiendo en un problema social por lo que en 1996, el Centro para la Audición y Comunicación (CHC) proclamó el Día Internacional de la Concientización sobre el Ruido el cual se celebra desde hace 20 años, este año se celebra el 29 de abril con el cual se trata de alertar a la población sobre los riesgos de la contaminación acústica, la cual va creando un trastorno auditivo en particular y en genera,l por lo cual se invita a todos a reducirla.
Es necesario ver con otros ojos la concientización sobre el problema del ruido. El arte y la reflexión colectiva han sido herramientas utilizadas en algunos de los 193 países que año con año celebran La semana del sonido de la UNESCO, evento único en su género que explora el sonido a partir de diferentes perspectivas: salud, música, cine, pero también a nivel sociológico.